jueves, 27 de marzo de 2008

damego dixit



Despojados de identidad; desprovistos de una mínima capacidad de sorpresa; banalizada nuestra experiencia cotidiana por una estructura de relación social basada en el olvido, el olvido de cualquier referente ético o estético para alcanzar el equilibrio, la felicidad; abocados a despreciar la inteligencia -al menos tras esas ocho o diez horas de irrenunciable ocupación asalariada- ; seducidos por la felicidad del ignorante, por la imbecilidad... ¿qué podremos crear?