lunes, 20 de agosto de 2007

damego dixit


Puede que ese interior del que brotan intuiciones, inventos, ideales, sabiduría al fin, no sea más que la expresión de la propia materia girando incontenible en nuestro ser. Y nosotros meros intermediarios, enlaces frente al caos.

Puede que realmente los poemas, las sinfonías, las pinceladas maestras sean ecos y alientos de otras voces, de otros cuerpos que aún se hallan en el viento. Y nos lo soplen.